martes, 31 de marzo de 2009

Ayer nació Ulises. Bienvenido, campeón!

lunes, 23 de marzo de 2009

Estaba viendo la tele y de pronto me he acordado de cuando me revolcaba por el suelo jugando a los Combois o a los Hombres de Jarrilson. Siempre terminaba con las rodillas llenas de mataduras, sobre todo en verano con los pantalones cortos.
Me he acordado porque estaban poniendo en la tele algo de semanasanta, con unas imágenes artistiquísimas de santos ensangrentados, colgados, clavados, atados, latigados, caídos, levantados, con miradas de película melodramática de domingo en la siesta y rodillas echadas abajo sin un betadine puesto. El locutor mientras hablaba de actos, cultos, pregones, señores machacados y señoras muy afligidas, apenadísimas y con muchísimos sufrimientos angustiosos.

sábado, 21 de marzo de 2009

Me encanta mi trabajo, hago fotos y me pagan por ello. No tengo un horario fijo y no tienes que fichar a la entrada y la salida, no hay un horario fijo con lo que te organizas y te administras tu mismo el tiempo. Es maravillosa esa sensación de que cada día es diferente. No cabe la rutina, ganas tan poco dinero que siempre estás disponible, con lo que no te relajas y por lo tanto no engordas con lo que te ahorras ir al gimnasio y tener que oler la testosterona de los demás. Tienes muchísimo tiempo libre, puedes estar una semana sin trabajar. Cualquiera se podría sentir mal por estar sin hacer nada pero esta sensación en este trabajo no cabe ya que no estar trabajando no significa que estés haciendo lo que te gusta y aprovechando tu tiempo, ya que en primer lugar no tienes dinero para hacerlo y segundo lugar, en cualquier momento puede saltar la noticia, el ojo de la actualidad te reclama y en medio segundo tienes que estar listo y cargado como una mula con una mochila rebosante de un material fotográfico carísimo, comprado por tí, claro, que pesa un huevo. Sin saber cómo, te ves montado en tu moto carísima con un seguro obligatorio a terceros carísimo a toda pastilla gastando gasolina carísima. Llegas al lugar donde se concentra el interés informativo y sientes la responsabilidad de ser el medio por el que le va a llegar al mundo lo que está ocurriendo. Lo quieres hacer bien. Una imagen tiene que condensar esa relidad. Un futbolista ha llegado a la ciudad, un político va a inaugurar un pantano, están enterrando a alguien o extrabajadores de alguna exempresa se quejan. Estimas que para obtener la mejor imagen debes retorcerte, tirarte al suelo y pelearte con el guardia de seguridad que "está haciendo su trabajo". Has conseguido el objetivo: tienes una buena imagen, un agobio del carajo y mucha prisa porque has tardado cuatro horas en hacerlo todo, no has comido todavía y te mueres de la resaca del día anterior ya que te acostaste a las siete de la mañana completamente borracho pensando que hoy sería como los ocho días anteriores y tampoco tendrías que hacer nada. Llegas al ordenador, eliges la foto, se te cuelga el puto windows, lo consigues, al día siguiente le pides al quioskero que por favor te deje ver el periódico, sin comprarlo y ahorrar dinero, para ver como ha quedado el trabajo, menos mal que ya me conoce y no me dice nada el hombre.
Un suspiro de alivio me sale de las entrañas: no se ha publicado la foto. No te van tener que pagar por hacer lo que te gusta.

viernes, 20 de marzo de 2009

Tengo la tele encendida pero no la veo desde aquí. Ahora está cantando Raphael, que grita "esto es un escándalo" y hace un segundo había una mujer hablando en un anuncio que decía que Pascual le ayuda a eliminar toxinas.


Hoy ha entrado la primavera, menos mal que se ha quitado el viento, la lluvia y el frío porque la verdad es que ya está bien, me fui al Cairo con lluvia, llegué con lluvia y siguió con lluvia.

En Cairo sin embargo no llovía, sino que hacía sol.Bueno, este dia lo que había era mucho viento y arena.


Los egipcios están locos
Bueno, no todos son así.


La ciudad parece una mezcla de coches, gente y basura en sana paz, que no entiendes y pronto te empieza a enganchar.





La gente está por todas partes y a cualquier hora, da igual que sea la una de la tarde que las tres de la mañana, siempre hay gente, mucha gente y en los mercados es ya algo exagerado.

Es alucinante, literalmente, la ropa de mujer que te encuentras, los hombres son un montón de aburridos vistiendo, las tiendas de hombres son lo más feo del mundo, pero las de ellas no tienen desperdicio, flipas con las cosas que se ponen debajo de esos levitones que llevan.

Comparen la diferencia de la ropa interior de ellas con la de ellos

Ya se sabe que ellas tienen más gracia para estas cosas que nosotros.


Hoy me he pasado el día delante de la pantalla del ordenador, tratando de poner un poco de orden en esas carpetas amarillas cuadradas con un nombre debajo que son lo más asqueroso del mundo. Las he terminado odiando. Me paso media vida creando carpetas y destruyéndolas, metiendo cosas dentro que luego, desde que perdí un índice maravilloso que estaba dentro de una de ellas, no se dónde están. Ahora a mi ordenador le ha dado por hacer lo que le sale del mismísimo. Básicamente se ha vuelto vago, tarda media vida en hacer cosas que aparentemente son muy fáciles, como saber lo que hay dentro de un deuvedé ¡habrá cosa más tonta que eso! Pues nada, no hay manera, se vuelto gilipollas. Lo peor de todo es que cuando más prisa tienes más tarda, a veces me imagino a los microchips descojonándose de mí.